14.09.2010, 17:12
Heredia, José María
1842 - 1905 Cuba / Frankreich
Antonio y Cleopatra
Juntos los dos contemplan desde altiva terraza
a Egipto adormeciéndose bajo un cielo asfixiante,
y hacia Sais y Bubastis corre el río gigante
en torno al negro Delta que sus ondas rechaza.
El invicto soldado, bajo la gran coraza,
cautivo de un ensueño infantil y distante,
siente contra su pecho como tiembla anhelante,
el cuerpo voluptuosos que estrechamente abraza.
Ella desató al viento sus oscuros cabellos
y le ofreció sus labios, de fugaces destellos
una lluvia dorada sus ojos despedían.
Inclinóse el ardiente Imperáter romano,
y en esos grandes ojos vio un inmenso océano
donde errantes galeras derrotadas huían.
1842 - 1905 Cuba / Frankreich
Antonio y Cleopatra
Juntos los dos contemplan desde altiva terraza
a Egipto adormeciéndose bajo un cielo asfixiante,
y hacia Sais y Bubastis corre el río gigante
en torno al negro Delta que sus ondas rechaza.
El invicto soldado, bajo la gran coraza,
cautivo de un ensueño infantil y distante,
siente contra su pecho como tiembla anhelante,
el cuerpo voluptuosos que estrechamente abraza.
Ella desató al viento sus oscuros cabellos
y le ofreció sus labios, de fugaces destellos
una lluvia dorada sus ojos despedían.
Inclinóse el ardiente Imperáter romano,
y en esos grandes ojos vio un inmenso océano
donde errantes galeras derrotadas huían.