15.10.2010, 18:48
Sanchís Sivera, José
Spanien
Soneto
Huyó la dicha y sucediole el llanto
cual ráfaga de luz en un instante
a España la guerrera y la triunfante,
matóle de balsares y de encanto.
Huyó a la eternidad del trono santo
el valeroso rey de paz amante
que cual águila en el espacio errante
todo lo cobijó bajo su manto.
Cual será, oh rey, el mísero destino
que por los tiempos correrá tu suelo
sólo lo sabe Dios, y en su camino
de llantos y desgracias desde el cielo,
junto con aquel ser que no se engaña
ruega sin tregua por el bien de España.
Spanien
Soneto
Huyó la dicha y sucediole el llanto
cual ráfaga de luz en un instante
a España la guerrera y la triunfante,
matóle de balsares y de encanto.
Huyó a la eternidad del trono santo
el valeroso rey de paz amante
que cual águila en el espacio errante
todo lo cobijó bajo su manto.
Cual será, oh rey, el mísero destino
que por los tiempos correrá tu suelo
sólo lo sabe Dios, y en su camino
de llantos y desgracias desde el cielo,
junto con aquel ser que no se engaña
ruega sin tregua por el bien de España.